La flor que quería ser mariposa.
Había una vez una pequeña flor llamada Margarita, que crecía en un jardín muy bonito. Margarita era una flor muy especial, porque soñaba con ser mariposa. Cada vez que veía a una mariposa volando, su corazón se llenaba de emoción y pensaba en lo maravilloso que sería volar como ellas.
"No dejes que nadie te diga que no puedes conseguir tus sueños. Si crees en ti mismo y trabajas duro, todo es posible."
Un día, Margarita decidió que iba a intentar convertirse en mariposa. Empezó a pedir ayuda a los otros animales del jardín, pero todos le decían lo mismo: "Eres una flor, no puedes convertirte en mariposa". Pero Margarita no se dio por vencida, y siguió intentándolo.
Un día, la abeja trabajadora del jardín le dio un consejo a Margarita: "Si quieres convertirte en mariposa, debes ser paciente y esperar a que llegue tu momento". Margarita pensó que era un buen consejo, y decidió seguir trabajando duro para conseguir su sueño.
"La paciencia es la clave para conseguir lo que quieres."
Pero el camino de Margarita no fue fácil. A menudo se sentía triste y frustrada, y pensaba que nunca conseguiría convertirse en mariposa. Sin embargo, siguió trabajando duro y esperando pacientemente.
Un día, Margarita se dio cuenta de que algo extraño estaba sucediendo. Sus hojas se estaban volviendo más suaves y sus pétalos estaban cambiando de color. Margarita no sabía qué estaba pasando, pero siguió esperando.
"Si quieres volar, primero tienes que ser capaz de creer que puedes."
Un día, Margarita se despertó y se encontró a sí misma rodeada de un capullo. Sabía que había llegado el momento de la metamorfosis. Margarita se sintió emocionada y nerviosa al mismo tiempo, pero sabía que estaba a punto de conseguir su sueño.
Después de unas semanas, el capullo se abrió y Margarita emergió como una hermosa mariposa. Era de color amarillo brillante y tenía las alas grandes y fuertes. Margarita se sintió tan feliz como nunca antes lo había sido, y empezó a volar alrededor del jardín, feliz de haber conseguido su sueño.
"La vida es un viaje de descubrimiento, y cada uno de nosotros tiene su propio camino."
Desde ese día, Margarita se convirtió en la mariposa más feliz y hermosa del jardín. Y aunque todos los demás animales se sorprendieron al verla, Margarita sabía que ella había conseguido lo que siempre había querido.
Espero que te haya gustado este cuento infantil. ¡Que tengas un bonito día!
HAY UN POEMA,
Una flor pequeña y delicada,
con sueños grandes y aladas
miraba al cielo y soñaba
con volar, con libertad.
Sus amigos, las abejas,
le decían "eso no es para ti".
Pero ella, valiente y terca,
seguía soñando sin fin.
Un día, la flor se dio cuenta
que su cuerpo empezaba a cambiar.
Las hojas se hacían más suaves,
los pétalos empezaban a mutar.
En un capullo se encerró,
y pacientemente esperó.
Hasta que un día, con gran emoción,
se convirtió en una mariposa.
Sus alas brillaban al sol,
de amarillo vivo y pasión.
Volaba libre, sin miedo a nada,
sintiendo que su sueño se había alcanzado.
La flor que quería ser mariposa
había logrado su anhelo.
Y aunque nadie le creyera,
ella siguió su propio camino.
Ahora, si alguna vez ves
una mariposa amarilla,
recuerda que puede haber sido
una flor que soñaba con volar con alegría.